Originalmente abrió sus puertas en 1923 con el nombre de Bayshore Golf Course, como parte de la ambiciosa subdivisión de Alton Beach del diseñador Carl Fisher, pensada para atraer a los ricos residentes de invierno de Nueva York, Indianápolis y Detroit. Para 1923, Fisher y sus colegas habían inaugurado tres campos de golf grandes. A los turistas les fascinaron los nuevos campos. Durante la Segunda Guerra Mundial, el ejército estadounidense alquiló el campo por $1 al año como campo de entrenamiento, para que los soldados con cascos y armas corrieran a través de las palmeras del campo entre el humo de las granadas. En 1944, inversores de Chicago intentaron adquirir el campo para construir 650 viviendas de primer nivel; los vecinos se opusieron y persuadieron a la ciudad para que comprara el terreno y conservara el campo de golf. En 1954, el elegante clubhouse de estilo mediterráneo construido por Fisher en el campo, fue reemplazado por uno nuevo. Cuarenta y ochos años más tarde, las tareas de remodelación han ido más allá que la incorporación de nuevos muebles y una nueva capa de pintura. A los 79 años, Bayshore Golf Course, el campo de golf insignia de Miami Beach, realizó remodelaciones por un total de $10 millones. |